INTELIGENCIA EMOCIONAL...

Introducción a la Inteligencia EMOCIONAL

Escribir un artículo sobre la Inteligencia Emocional es ralamente atractivo y fascinante.

Es descubrir a medida que se desarrolla, elementos de mucha importancia que cotidianamente las personas deberían implementar para controlar con mayor seguridad sus emociones.

Psicólogos y psiquiatras que han dedicado muchos años de su vida al estudio de este tema,
Proponen la existencia de una escuela para la re- educación o

re- aprendizaje de las emociones , debido a que , por lo general ,

en la sociedad, sobresalen mas aquellas personas que se comportan seguras, decididas y auto- controladas.

Saber auto –dominarse, persistir en la consecución de metas u objetivos y auto motivarse alo largo de la existencia humana, son habilidades que conforman la inteligencia emocional
(Goleman 1995)

¿Que es la Inteligencia Emocional?

Es sencillamente saber controlar adecuadamente las emociones, permitiendo de esta manera, reaccionar asertivamente ante las diferentes situaciones en el desarrollo de nuestras vidas...
En muchos casos nos sentimos asaltados por cambios bruscos del carácter, provocados por estímulos de poco peso emocional .

Sin embargo nos hacen estallar de una manera tal que pasada

la tormenta, nos arrepentimos de haber respondido tan fuerte y apasionadamente sin medir consecuencias.

Es, en estos momentos, cuando lo impulsivo supera lo racional.

¿Que nos lleva a reaccionar de manera impulsiva?

Si se explica de manera neurológica puede resultar un tanto difícil debido a que el funcionamiento y anatomía del cerebro son muy complejos.

Expuesto de manera sencilla: Existe en el cerebro una parte llamada amígdala que es la encargada de poner en emergencia a distintas partes del mismo, originando una respuesta inmediata al estimulo provocador.

Es decir, puede provocar una reacción de miedo, tristeza, ira, entre muchas, sin medir los efectos consiguientes.

Otra parte del cerebro, que también tiene relación directa con las emociones, pero que no envía las respuestas inmediatamente en la neocorteza.

Esta manda la información más lenta, más completa y es más refinada su reacción.

Finalizando un poco esta breve explicación sobre estas dos partes fundamentales del cerebro, puede decirse entonces, que el mismo posee dos sistemas de memoria: una para los datos corrientes y uno para aquellos que posean cargo emocional.

¿Y cuales son todas aquellas emociones a las que hago referencia?

En una breve reseña de estas emociones encontramos:

Ira:
Furia, ultraje, cólera.

Tristeza:
Congoja, pensar, melancolía.

Temor:
Ansiedad, nerviosismo.

Placer:
Felicidad, alegría, dicha.

Amor:
Aceptación, simpatía, confianza.
Sorpresa:
Conmoción, asombro, desconcierto.

Disgusto:
Desdén, desprecio, menosprecio.

Vergüenza:
Culpabilidad, molestia, disgusto.

Esta lista de emociones resumida ha sido tomada del libro “Inteligencia Emocional”

Cuyo autor es Daniel Goleman.

¿Cómo podemos manejar estas emociones Inteligentemente?

Quizás las que mas nos preocupan y consideramos importante aprender a controlar son aquellas emociones de ira, tristeza y ansiedad, debido a las consecuencias que generan.

Podemos utilizar ciertas técnicas que ayuden a canalizar estos estados de ánimo.

Ante
La IRA:

Respirar profundamente y ala vez tratar de relajar los músculos, creando una sensación agradable en nuestros cuerpos.Esto permite que baje la concentración de adrenalina acumulada para retomar la calma antes perdida.

Ante
La TRISTEZA:

Tratar de distraerse buscando la compañía de buenos amigos, ver un programa de televisión, ir al campo, la playa y /o a cualquier sitio que nos pueda alejar de la depresión que nos embarga.

Ante
La ANSIEDAD:

Relajarse profundamente, tomar conciencia de las situaciones que nos preocupan y jerarquizarlas. Asumir los problemas con actitud positiva, es decir, pensar que todo tiene solución.


Resumiendo se podría decir que para manejar adecuadamente las emociones hay que tomar conciencia de uno mismo, también darse cuenta de cuales son nuestras debilidades y fortalezas para asumir la responsabilidad de las actitudes propias con las consecuencias que estas generan.

Si hacemos un pequeño análisis de cómo reaccionamos emocionalmente, con la información suministrada en este artículo y consideramos que nos resulta difícil controlar nuestras emociones, seria conveniente, buscar ayuda profesional.

Dra. Marsella Jiménez S.

PSICÓLOGA