Había una vez una niñita sentada en un parque, todos pasaban por su lado y nunca nadie se detenía a preguntarle que le ocurría. Vestida con un traje descolorido, zapatos rotos y sucios. La pequeña niña se quedaba sentada mirando a todo el mundo pasar. Ella nunca trato de hablar, nunca dijo una sola palabra. Muchas personas pasaban a su lado pero nunca nadie se detuvo.
Al día siguiente yo decidi volver al parque para ver si la pequeña niña todavía estaba ahí. Si..Ahí estaba!!!, en el mismo lugar que estaba ayer, con la mirada de tristeza en sus ojos.
Me dirigí hacia ella, al acercarme note que en su espalda tenía una joroba; Ella me miro con una tristeza tan profunda que me rompió el alma. Me senté a su lado sonriendo y le dije: “Hola”. La pequeña me miro sorprendida y me respondió el saludo con una voz muy baja.
Hablamos mucho rato hasta llegar la tardecita.. Cuando apenas quedábamos nosotras dos le pregunte porque estaba tan triste? La niñita me miro con lagrimas en los ojos y me dijo: “Porque soy diferente”.
Yo le respondí con una sonrisa: Si,” lo eres”, y ella dijo aun más triste: Si….lo sé.
Le respondí: Pequeña ser diferente no es malo…”Tu me recuerdas a un gran y bello ángel lleno de luz”; Ella me miro y sonrió por primera vez, se levanto y me pregunto: Es cierto lo que dices? Y en ese momento la pequeña niña se paro y de su pequeña joroba brotaron “dos grandes y preciosas alas”.
Eres el ángel enviado para cuidar y proteger a todos los que caminan por aquí. Ella afirmo, me sonrió y me dijo: “YO SOY TU ANGEL GUARDIAN” yo no sabía que decir..Me dijo: “Por primera vez pensaste en alguien más”. Mi misión está cumplida.
Le pregunte por qué nadie le había ayudado; Ella me dijo “Tú eras la única persona que podías verme”,
Y ante mis ojos “Desapareció”.
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