jueves, 14 de julio de 2016

LA CULPA!






Dentro del ranking de los sentimientos más torturadores que existen, en los primeros lugares figura" La Culpa". Parece que nos es más fácil perdonar al otro que a nosotros mismos.
Nos convertimos en jueces intransigentes y nos aferramos a los comportamientos que aparentemente nos condujeron a equivocarnos en el pasado, negando el hecho de que actuamos con el nivel de conciencia que en esa época teníamos.
 
La culpa aparece como resultado de la creencia de que debemos ser perfectos. Dios nos creó libres y al ser libres no siempre acertamos en nuestras decisiones. Equivocarnos también es parte de la perfección y del aprendizaje; Los errores también nos ayudan a crecer.
De hecho, NO se equivoca quien no hace nada. Definitivamente, la vida es tan buena maestra que nos ofrece lecciones todo el tiempo, que sean correctas o erradas depende de cómo las percibamos e interpretemos.
No seamos tan duro con nosotros. ¿Quién no ha fallado alguna vez? Los desaciertos son oportunidades de cambio; De modo que no sigamos mortificandonos y enfadadandonos con nosotros mismos.
Continuar reprochándonos nuestras faltas es como ingerir diariamente pequeñas dosis de veneno y nos hace mucho daño.
No es justificarnos ni ignorar el daño.
Una cosa es sentirnos culpables, quedarnos ahí sin hacer nada, esperando castigo y otra bien distinta es perdonarse uno mismo, ofrecer perdón y enmendar
Así que asumamos la responsabilidad de nuestros actos. Dios no es un Padre castigador, ¿para qué nos hostigamos? Al reconocer y perdonar nuestras fallas, comprendemos también las de los demás, nos mostramos más compasivos y avanzamos en nuestro camino.
La culpa puede afectar desde nuestra autoestima, autoconfianza, nuestro merecimiento (al creer que no somos dignos de la cosas buenas de la vida por nuestras malas acciones ) hasta nuestra salud ya que es socia , busca al castigo y nos enfermamos, buscamos escapar en las adicciones, en depresiones, nos dejamos manipular..

*Te sugiero además que revalúes tu escala de valores, lo que está bien para ti y lo que no lo está también. Cada día somos diferentes al anterior, más maduros, más flexibles. Revisemos que no estémos cayendo en los mismo patrones rígidos de antes. Tampoco tenemos que sentirnos mal por no cumplir con las expectativas de alguien.
Ocupémonos cada uno de nosotros mismos y hagamonos cargo de lo que nos corresponde, no andemos con la mochila de los demás.
 
"Vive y deja vivir".

No eclipses tu vida, no te prives de la alegría de tu hoy. Corta con el lazo de la culpa, renuncia a su tormento, no hay falla en nosotros. Decídamonos y hoy mismo exigamos nuestra libertad.
Elijo amarme y aceptarme tal y como soy, con mis virtudes y mis fallas - te invito a que tu también recuperes tu poder aceptándote, perdonándote y amándote incondicionalmente.
 
AME




 
 



No hay comentarios: